(El Gardel rockero de Salvador Arango en el Parque- Aeropuerto Olaya Herrera)
La Alcaldia hará Festival del Tango
La ciudadanía podrá encontrarse con este ritmo del sur en Manrique, Plaza Gardel, Pasaje Carabobo, Barrio Antioquia, Aranjuez, Castilla, Santo Domingo, Villa Hermosa, La Milagrosa, Belén Parque Los Deseos, Cerro Nutibara y diferentes parques de otros barrios en los que se desarrollaría Tango al Parque.
La primera versión oficial del Festival estará dedicada a la memoria de Carlos Gardel y al centenario del nacimiento de Hornero Manzi
La Alcaldía de Medellín, en cabeza de la Secretaría de Cultura Ciudadana y Subsecretaría de Turismo, tiene la responsabilidad de este evento con un presupuesto especial de 150 millones de pesos; el Aeroparque Olaya Herrera destinó 50 millones de pesos, y el operador del certamen, Comfenalco, 20 millones de pesos.
De Medellín a Tokio
El tango se mantiene con vida, y no sería necesario que fuera un género masivo gracias a la pasión que sienten en Medellín personas como Leonardo Nieto, José "Chepe" Rúa, Marino Galván, Wilson Vélez, Laura Marín, y muchos otros, aunque ya no despierta ese fanatismo del siglo pasado que llevó inclusive a suicidios al frente de un cuadro de Gardel y una canción suya de fondo. Es un ritmo que ha viajado por todo el mundo, en Tokio existen bares de tango todas las noches de la semana, siempre hay alternativas de milonga en la ciudad de neón y los bares de karaoke.
Leonardo Nieto, un argentino que se enamoró a primera vista de Medellín y que organizó en gran medida los primeros cuatro festivales de tango, además de instalar la estatua de Gardel en la carrera 45 de Manrique, dice que el adjetivo de Medellín como Capital del Tango, fue obra de la prensa. Recuerda que desde "Mi Buenos Aires Querido", llegaron en un chárter casi 80 personas al Primer Festival de Tango Internacional en 1968, "el más grande por fuera de Argentina".
Medellín en ese entonces era evidentemente una ciudad muy tanguera, dice Leonardo Nieto, sentado en el segundo piso del Salón Versalles, en una mesa de manteles azul y blanco, mismo color de su camisa, "Yo vine a pasear y quedé sorprendido de lo que era el tango acá", Guayaquil era un sector colmado de bares en los que solo sonaba tango, lo que sí no compartía era el tipo de música, la arrabalera, la que más incitaba a beber, cuando existen verdaderos poemas".
La vida es un tango
¿Qué les hace falta? Pregunta el mesero. Aguardiente responde el señor que mira a la mujer riéndose por su chiste; la pareja de la mano y compartiendo torta y helado, escucha a un intérprete que es aplaudido entre estrofa y estrofa, para dar pie a José de Jesús Rúa, quien saluda a un miembro de la Asociación Gardeliana de Colombia.
Sentado al lado de la barra, observando a sus colegas, Marino Arredondo Villada, de nombre artístico Marino Galván, y conocido como El Señor del Tango, lleva 45 años cantando tangos a lo largo del \ país, dice que el tango no es música colombiana. Hace parte del Club Amigos del Tango, y rescata que el baile tiene gran acogida en Medellín.
"Chepe" Rúa, vocal de la Asociación Gardeliana y del Club Amigos del Tango, cuenta que una fuente que alimentó la pasión por el tango en Medellín, fue el cine argentino: "Hay un tango de Armando Moreno con la orquesta de Enrique Rodríguez, se llama Yo Soy el Mismo; desde muchacho me gusta el tango porque mi madre me llevó de la mano a ver una película, La Vida es un Tango".
La primera versión oficial del Festival estará dedicada a la memoria de Carlos Gardel y al centenario del nacimiento de Hornero Manzi
La Alcaldía de Medellín, en cabeza de la Secretaría de Cultura Ciudadana y Subsecretaría de Turismo, tiene la responsabilidad de este evento con un presupuesto especial de 150 millones de pesos; el Aeroparque Olaya Herrera destinó 50 millones de pesos, y el operador del certamen, Comfenalco, 20 millones de pesos.
De Medellín a Tokio
El tango se mantiene con vida, y no sería necesario que fuera un género masivo gracias a la pasión que sienten en Medellín personas como Leonardo Nieto, José "Chepe" Rúa, Marino Galván, Wilson Vélez, Laura Marín, y muchos otros, aunque ya no despierta ese fanatismo del siglo pasado que llevó inclusive a suicidios al frente de un cuadro de Gardel y una canción suya de fondo. Es un ritmo que ha viajado por todo el mundo, en Tokio existen bares de tango todas las noches de la semana, siempre hay alternativas de milonga en la ciudad de neón y los bares de karaoke.
Leonardo Nieto, un argentino que se enamoró a primera vista de Medellín y que organizó en gran medida los primeros cuatro festivales de tango, además de instalar la estatua de Gardel en la carrera 45 de Manrique, dice que el adjetivo de Medellín como Capital del Tango, fue obra de la prensa. Recuerda que desde "Mi Buenos Aires Querido", llegaron en un chárter casi 80 personas al Primer Festival de Tango Internacional en 1968, "el más grande por fuera de Argentina".
Medellín en ese entonces era evidentemente una ciudad muy tanguera, dice Leonardo Nieto, sentado en el segundo piso del Salón Versalles, en una mesa de manteles azul y blanco, mismo color de su camisa, "Yo vine a pasear y quedé sorprendido de lo que era el tango acá", Guayaquil era un sector colmado de bares en los que solo sonaba tango, lo que sí no compartía era el tipo de música, la arrabalera, la que más incitaba a beber, cuando existen verdaderos poemas".
La vida es un tango
¿Qué les hace falta? Pregunta el mesero. Aguardiente responde el señor que mira a la mujer riéndose por su chiste; la pareja de la mano y compartiendo torta y helado, escucha a un intérprete que es aplaudido entre estrofa y estrofa, para dar pie a José de Jesús Rúa, quien saluda a un miembro de la Asociación Gardeliana de Colombia.
Sentado al lado de la barra, observando a sus colegas, Marino Arredondo Villada, de nombre artístico Marino Galván, y conocido como El Señor del Tango, lleva 45 años cantando tangos a lo largo del \ país, dice que el tango no es música colombiana. Hace parte del Club Amigos del Tango, y rescata que el baile tiene gran acogida en Medellín.
"Chepe" Rúa, vocal de la Asociación Gardeliana y del Club Amigos del Tango, cuenta que una fuente que alimentó la pasión por el tango en Medellín, fue el cine argentino: "Hay un tango de Armando Moreno con la orquesta de Enrique Rodríguez, se llama Yo Soy el Mismo; desde muchacho me gusta el tango porque mi madre me llevó de la mano a ver una película, La Vida es un Tango".
La mujer en el tango
Para Laura Marín, bailarina profesional, Campeona Nacional de Tango y Ritmos Argentinos, otra ciudad con un gusto amplio por el tango, el papel de la mujer desde el punto de vista del baile, es el de una artista que sabe escuchar con su cuerpo, que espera paciente lo que el hombre quiere comunicar. "Su iniciativa y creatividad solo se dada en momentos donde existe la oportunidad, ahí es donde se conoce su profesionalismo, el hombre la lleva para que luzca al público su elegancia y sensualidad".
Para Laura Marín el festival fortalece la pasión y el talento que tantas personas tienen, "refuerza la imagen de los tangueros en la ciudad, además de ser una oportunidad turística y cultural".
Formar escuelas
Para difundir el baile en los ciudadanos habrá un evento, Tango al Parque, informa Wilson Vélez, Director Artístico del Festival Internacional de Tango Ciudad de Medellín. "En 8 parques habrá una pareja que enseñará 8 pasos básicos". Están planteadas también una escuela de bandoneistas y otra de tango.
Con relación esto dice Chepe Rúa: "Espero que algún día salgamos de ese letargo aquí en Medellín, decimos ser Capital del Tango y no poseemos orquestas, mientras en Tokio sí, necesitamos gente profesional que sepa leer música más allá del talento las ganas y el empirismo".
Poesía
"El tango como poesía, excelente, excelente...", comenta Leonardo Nieto y agrega que le desea lo mejor a este evento que convoca procesos de formación ,eventos académicos y espectáculos, y que se disfrutará en Medellín entre el 22 de junio y el 2 de julio, para los amantes del tango y para los que quieran observar una muestra más de la pasión del hombre por la música y la danza.
A los que critican el festival, no vale la pena ni responderles dice Leonardo Nieto, "es cuestión de gustos, de saber aceptar, hay que ser abierto. El aficionado al tango sí va a encontrar en el festival un mensaje importante, y lo mejor, el ciudadano del común no estará excluido del evento.
(Centrópolis N. 61, mayo del 2007)
---Tango al Parque---
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